domingo, 5 de mayo de 2013

Las cosquillas en la barriga de viajar


Sentada en la T2 del aeropuerto de Barcelona, me dispongo a escribir una nueva entrada. Tenía muchas dudas sobre qué escribirla y poco tiempo para plantearla. Pero después de pensarlo he decidido hablar de viajar.
Para mi viajar es una de mis primeras prioridades (a parte de la familia, los amigos y el estudio). Adoro viajar y siempre que puedo lleno mi maleta y me dispongo a ir donde sea. El destino no es realmente lo importante. Lo que importa en realidad es la futura experiencia que vas a tener: ver sitios nuevos, conocer gente nueva, empaparte de nuevas historias, sumergirte en otra cultura y practicar o aprender un idioma.
Viajar es una gran aventura que empieza desde el momento en el que sacas el billete y ya empiezas a imaginar como será el viaje. En nuestras mentes vagan ligeras ideas de lo que queremos hacer cuando estemos en el lugar y de las experiencias que tendremos.
Hoy en día, la mayor parte de los viajes los hacemos en avión: rápido, barato y cómodo (aunque cada vez vamos más cerca de la persona que se sienta a nuestro lado...).
El aeropuerto es uno de los mejores sitios, en el que si pudiera, viviría. Un montón de gente de diferentes naciones con un mismo fin: llegar a un lugar. Pero la mejor parte es la puerta por donde salen los que han llegado. Siempre hay alguien esperando a alguien. Con mariposas en el estómago y observando detenidamente a toda la gente que sale por la puerta; analizándola a ver si es la persona que ellos esperan. Sólo de pensarlo ya siento como si estuviese montada en una montaña rusa y llegara el momento de la bajada.
Eso es todo. Sólo quería compartir lo que siento al viajar, es una de las cosas más emocionantes que puedes hacer en la vida. Espero poder seguir viajando muchísimo y así aprender y vivir experiencias.


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